En la universidad tomamos todas estas clases sobre teoría del color, taller de dibujo a mano alzada, talleres de distintos materiales como madera, metales, etc (en mi caso, por ser diseñadora industrial) y recuerdo que algún profe tuvo la iniciativa de enseñarnos cómo cobrar nuestro trabajo. A la tierna edad de 20-poquitos y en un salón lleno de tus compañeros igual de (vamos a llamarle...) despistados, ¡claro que te valió queso la información! Años después me sigue costando mucho trabajo saber cuánto cobrar por mis conocimientos que me han costado lágrimas, dinero, tiempo, maquinaria y un sin fin de cosas más tangibles y no tangibles. Hay mil maneras de sacar tus costos como diseñador freelance y cada quién se da un valor; que puede llegar a ser peligroso porque cada quién se tiene una estima distinta. Ja, ja, ja. En mi andar por el cyber-espacio dí con el web-site de La Asociación de Profesionales de la Comunicación Visual y cuya portada lee lo siguiente:
4 Comentarios
|
CarolitaEgresada del ITESM campus GDL. Hija, docente, hermana, diseñadora, mujer, madre de un pomerania. Archives
Junio 2017
Categories |